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Lo demás es historia: 25 años de Honda Civic Type R


Ya hablamos en su momento del nuevo Honda Civic Type-R de última generación, que me sigue pareciendo un coche de padre «tuneao», pero el emblemático Civic de Honda no sólo cuenta con ese modelo, ya que las versiones más dinámicas celebran 25 años en nuestros mercados y también se celebran 50 años de producción ininterrumpida de la enseña Honda (tiene más historia).


A pesar de ser el Type R más asequible, las versiones del Civic encarnan la filosofía del Type R en su máxima expresión gracias a su ingeniería exquisita y su dinámica emocionante. A lo largo de seis generaciones, la fórmula ha evolucionado hasta brindar a los clientes el modelo de cinco puertas de alto rendimiento con tracción y motor delanteros definitivo: un vehículo capaz de gestionar los trayectos del día a día, y enfrentarse a la pista los fines de semana.


La marca Type R se remonta al Honda NSX Type R de 1992, que subió el listón en cuanto a rendimiento y capacidad dinámica, pero solo estaba disponible en un número extremadamente limitado. La filosofía del Type R se aplicó al Civic siguiendo una ética de ingeniería similar a la del Integra y el NSX a fin de proporcionar una conducción estimulante y gratificante.


La primera generación se puso a la venta, únicamente, en el mercado japonés y contaba con unas especificaciones de alto nivel: un motor 1.6 VTEC DOHC que generaba la increíble cifra de 116 CV por litro, una carrocería ligera con costuras soldadas que contribuyó a un peso total del vehículo de solo 1050 kg, junto con un diferencial autoblocante específico y unos componentes de suspensión únicos para transformar la experiencia de conducción. La versión inicial, puso en marcha la búsqueda del modelo de cinco puertas de alto rendimiento con tracción y motor delanteros definitivo.


Como resultado del éxito arrollador de la primera generación del automóvil, la segunda generación se comercializó en toda Europa, gracias, en parte, a que ahora se fabricaba en el Reino Unido. El nuevo vehículo introdujo un motor nuevo, un 2.0 i-VTEC DOHC que redefinió lo que un motor atmosférico convencional de dos litros era capaz de generar. Contaba también con frenos mejorados, una transmisión de gran precisión con seis velocidades y relaciones cortas, y una carrocería en la que se empleaba un uso intensivo de acero de gran resistencia a la tracción que logró incrementar la rigidez torsional estática en un 80 % con respecto a la versión anterior. Una suspensión de brazo con enlace de control de convergencia en la parte delantera y una suspensión de doble brazo con enlace reactivo en la parte trasera se combinaron con una nueva dirección asistida eléctrica y un sistema de desmultiplicación variable para ofrecer unas sensaciones y una respuesta magníficas.


La tercera generación del Civic Type R era única puesto que los modelos europeos y japoneses eran radicalmente distintos. En Europa se recibió un modelo de cinco puertas, que mantenía el motor probado 2.0, pero empleaba un nuevo chasis en el que se había desplazado el depósito de combustible debajo de los asientos delanteros para incrementar el espacio interior y el nivel de flexibilidad. En cambio, a los clientes japoneses se les ofreció el modelo de cuatro puertas, que proporcionaba una experiencia de conducción aún más orientada al rendimiento gracias a elementos adicionales.


Como variaron las expectativas del mercado y de la normativa, se hizo inevitable la adopción de la turboalimentación. Los ingenieros de Honda trabajaron con meticulosidad para desarrollar el motor 2.0 turboalimentado, cuya potencia de 310 CV le permite brindar un rendimiento explosivo. Para controlar mejor ese aumento significativo de la potencia, Honda introdujo su suspensión reforzada, acompañada de un LSD para contrarrestar los efectos del par motor sobre la dirección que se producen en los automóviles de tracción delantera de alta potencia. El Civic Type R de 2015 aceleraba de 0 a 100 km/h en solo 5,7 segundos y estaba equipado con discos delanteros de gran diámetro, que formaban parte de su sistema de frenado Brembo de alto rendimiento. Esta versión demostró ser un punto de partida excelente para crear automóviles de competición. De hecho, ganó varios títulos de la Copa Mundial de Turismos en todo el mundo.


La penúltima versión, introducida en 2017, constituyó el paso evolutivo definitivo del Civic Type R. Este nuevo automóvil, con una evolución considerable, adquirió todo un elenco de nuevas características mecánicas, como los amortiguadores adaptativos, y otras mejoras en el motor para alcanzar una potencia de 320 CV. Este modelo introdujo también carga aerodinámica para ofrecer una conducción aún más intensa. Además, el paquete aerodinámico externo estaba coordinado con el suelo, prácticamente plano, para contribuir activamente a una elevación negativa. Este modelo se presentó también en Estados Unidos, región que lideró las ventas globales del vehículo.


En este automóvil de nueva generación, que se comercializará más tarde este mismo año, las tecnologías que se han desarrollado durante varias generaciones también han avanzado y mejorado. Mientras las nuevas tecnologías y la aerodinámica mejorada han ayudado a superar las expectativas una vez más y han derivado en el Civic Type R más rápido, gratificante y adictivo que se ha fabricado jamás. El Civic Type R de 2022, que todavía mantiene el récord de pista en el circuito de Suzuka (que os hablamos en su momento), es una forma perfecta de celebrar los 25 años de la marca Type R.

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