Porsche 911 GT3 Touring. Un noble inglés muy exclusivo

Entre las responsabilidades y obligaciones que imponen las tradiciones, un noble inglés encuentra una distracción satisfactoria al volante de un 911 GT3 (uno de los coches de mis sueños húmedos).

A los 26 años, el afortunado William Herbert llevaba dos trabajando para Sir Terence Conran de diseñador industrial. Pero la repentina muerte de su padre, en 2004, trastocó toda su vida. Tuvo que abandonar el trabajo y regresar definitivamente a la casa familiar en el suroeste de Inglaterra.

La casa en cuestión era Wilton House, quizá la mejor residencia del siglo XVII del Reino Unido, situada en unas 5.700 hectáreas de campiña en Wiltshire. Contiene una de las colecciones de arte privadas más importantes del mundo. Will, el joven y prometedor diseñador, era ahora 18º conde de Pembroke, en la sede de una casa ancestral que había pertenecido a la familia durante cuatro siglos.

Hoy, a la edad de 44 años, Lord Pembroke lleva su papel con naturalidad (con la naturalidad de haber heredado el título de conde). Habla con profundo conocimiento y gran cariño de la finca, de sus alegrías y de los muchos asuntos que debe resolver. Y, con igual entusiasmo, de su amor de toda la vida por los coches.

En la actualidad, la antigua escuela de equitación del siglo XVIII de Wilton alberga una impresionante colección de coches deportivos clásicos y modernos, donde la incorporación más reciente es un 911 GT3 Touring, un coche que ya parece tener al conde totalmente hechizado.

Sin embargo, hubo consideraciones prácticas para un hombre de familia discreto y devoto que prefiere pasar desapercibido. Es un coche que no llama mucho la atención, pero para los que lo conocen, un Porsche increíblemente singular y especial.

La búsqueda duró casi un año, con la ayuda de varios concesionarios y Centros Porsche para encontrar una unidad con las especificaciones adecuadas. Cuando finalmente apareció una, Lord Pembroke lo reservó sin ni siquiera verlo personalmente, pero nunca lo ha lamentado.

Para alguien con un interés tan arraigado en el mundo del automóvil y con una variada colección personal que incluye varios de los deportivos más codiciados del siglo XX, ¿por qué un 911 se ha convertido en el preferido de Lord Pembroke?. Por ejemplo, el diseño es realmente discreto comparado con el de muchos otros supercoches". Es más elegante, el ajuste y el acabado son excepcionales. Pero en realidad, se trata de ese motor, que es simplemente asombroso. Tiene un toque de coche de carreras y cuando pasas de las 8.000 rpm sigue empujando, el motor grita y suena de maravilla. De hecho, se plantea, muy seriamente, instalar asientos traseros para poder usarlo todos los días en el colegio.

Independientemente de la muerte repentina de su padre; Lord Pembroke es un hombre afortunado y conduce uno de mis sueños diariamente. Desde esta humilde publicación, le damos la enhorabuena por ese hecho y por su afición de cuna por el mundo del automóvil. No obstante, da fe de poder conducir una "bestia" discreta con 510 cv, 470 Nm de Par máximo y capaz de acelerar de 0-100 Km/h en 3,9 segundos, alcanzando una punta de 320 Km/h y asociado a un cambio manual de 6 relaciones, aunque en la nueva generación, también existe una caja de cambios PDK automática de 7 relaciones.